Ciudad de México. Al menos 85 por ciento de los casos de cáncer de pulmón son por causa del tabaquismo, por lo que es una enfermedad que ocasiona la muerte de prácticamente todos los pacientes, advirtió el coordinador de la Clínica del Pulmón del Instituto Nacional de Cancerología (Incan), Óscar Arrieta.
En vísperas de celebrarse el Día Mundial sin Tabaco, que se conmemorará este 31 de mayo, explicó que el cáncer de pulmón es la primera causa de muerte por neoplasia en México y en el mundo, además de que al año se presentan casi 10 mil casos nuevos, con casi el mismo número de muertes.
El galeno advirtió que, al ser una enfermedad asintomática, “silenciosa”, no se detecta en etapa temprana, porque las personas acuden al servicio médico hasta que se encuentran en periodo avanzado, “cuando ya no hay nada qué hacer”.
Óscar Arrieta reveló que sólo 0.6 por ciento de los casos se diagnostica a tiempo; mientras que 24 por ciento ya se detecta localmente avanzado, y casi 65 por ciento en periodo crítico.
El especialista explicó que el principal problema que presenta este padecimiento es que cuando el tumor crece, invade el bronquio, por lo que los síntomas son tos con sangre y falta de aire; además de que el enfermo pierde peso y siente malestar general.
Si afecta el hueso, este cáncer ocasiona dolor, lo que obliga a la persona a acudir al servicio médico en donde en ocasiones hay casos en los que no se registran como cáncer de pulmón, porque el afectado fallece con diagnóstico de neumonía o tuberculosis.
Óscar Arrieta precisó que otros factores que contribuyen al desarrollo de esta patología son la exposición al humo de leña y a minerales como el asbesto, así como a la tuberculosis.
Los tratamientos dependen del tipo de tumor y en la actualidad se trata de personalizar esta atención, primero con la realización de estudios para definir tipos de mutación o cambios en el ADN que puedan predecir la respuesta al tratamiento, con el propósito de que sean específicos para cada paciente.
Por lo pronto, explicó que lo más conveniente es el tratamiento local, que consiste en cirugía, radioterapia o radiocirugía, de manera que, con alguna de las diferentes modalidades, el paciente puede tener control de la enfermedad en etapa temprana.
Cuando el tumor se encuentra en etapa localmente avanzada, cuando no se puede extirpar mediante cirugía por el riesgo de dañar vasos sanguíneos grandes, corazón y vertebras, el tratamiento es con radioterapia y quimioterapia.
En periodo avanzado, se aplica quimioterapia para mejorar la expectativa de sobrevida, pero advirtió que no se cura, de ahí que con el tiempo derive en el fallecimiento del paciente.
Add Comment