Ciudad de México. El Nuevo Aeropuerto de la Ciudad de México (NAICM), uno de los proyectos emblemáticos del gobierno federal y pieza clave para convertir a México en una plataforma logística global, detona una estrategia financiera para hacer un proyecto autofinanciable.
La Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) señaló que en la presente administración, la conectividad aérea del país creció considerablemente, pues se abrieron más de 260 rutas nacionales y 190 internacionales.
Asimismo, la próxima entrada en vigor de un acuerdo bilateral de servicios aéreos con Estados Unidos afianzará el crecimiento futuro de la industria aeronáutica en México, expuso en el Informe Semanal de su Vocería.
El nuevo aeropuerto, apuntó, es un proyecto sustentado en tres pilares: un diseño de ingeniería de la clase mundial, que permitirá tener una terminal sustentable y de vanguardia, y un esquema de contrataciones vinculado a la secuencia constructiva y a la transparencia.
También una estrategia financiera diseñadas por la Secretaría de Hacienda para hacer un proyecto autofinanciables que otorgue certidumbre a la obra y disminuya el impacto en las finanzas públicas.
En este contexto, informó que Nacional Financiera (Nafin), la banca comercial y el Grupo Aeroportuario de la Ciudad de México (GACM) firmaron un convenio el pasado 27 de julio que prevé dar acceso a proveedores y contratistas a un mecanismo financiero que incentive una mayor participación de empresas nacionales.
El acuerdo establece dos productos: uno para grandes proveedores mediante el cual Nafin apoyará para cubrir hasta 70 por ciento de la garantía para obtener una línea de crédito de la banca comercial -con tasas de 10 y 11 por ciento y un plazo máximo de 42 meses– para capital de trabajo hasta por 50 por ciento del contrato que tiene formalizado con el GACM.
El otro producto es para pequeñas y medianas empresas a través del esquema «Cadenas productivas«, el cual ofrece agilidad, seguridad y transparencia para el cobro de facturas desde el banco comercial de su preferencia, que permite a los subproveedores tener disposición inmediata de recursos y requisitos mínimos de contratación sin costo.
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