Una fuerte granizada azotó al poniente de la Ciudad de México la noche de este lunes, particularmente en Huixquilucan, Cuajimalpa y Santa Fe.
La tormenta estuvo acompañada de lluvias muy fuertes, rachas de viento y caída de hielo en Huixquilucan.
El fenómeno natural generó la caída de ocho árboles, dos postes de luz derribados. Afortunadamente no provocó daños personales, que lamentar.
Es la tormenta más fuerte que hemos vivido en Huixquilucan en mucho tiempo, con granizos más grandes que una moneda de 10 pesos, señalaron autoridades, quienes coordinaron los trabajos de retiro de árboles y limpieza de calles.
El caos vial fue evidente porque las calles quedaron bloqueadas por el hielo que flotaba en encharcamientos e inundaciones.
El núcleo de tormenta generó también apagones, una parte de Tecamachalco se quedó sin energía eléctrica, la cual se fue restableciendo progresivamente.
La lluvia empezó alrededor de las 19:00 horas y se prolongó por media hora a 45 minutos, dejando intransitable avenidas como Paseo de La Herradura, Magnocentro, Tecamachalco y Lomas Anáhuac.
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